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Vaporizador de combustión sumergida

Introducción
En la figura 2 se muestra un sistema típico SCV. El GNL fluye a través de la serpentina del tubo de acero inoxidable que está sumergido en un baño de agua que se calienta por contacto directo con los gases de salida calientes del quemador de gas sumergido. Los gases efluentes se dispersan dentro del agua mediante un distribuidor ubicado debajo de los tubos de transferencia del calor. La acción de dispersión promueve turbulencia resultando en un índice alto de transferencia del calor y una alta eficiencia térmica (más del 98%). La turbulencia también reduce sedimentos o escamas que pueden acumularse en la superficie de transferencia de calor.

Ventajas
Las unidades SCV son equipos probados muy fiables que tienen muy buen historial de seguridad. La falta de gas se puede detectar rápidamente mediante los detectores de hidrocarburo que se traducirá en un corte de la planta. No existe peligro de explosión, debido al hecho de que la temperatura del baño de agua siempre permanece por debajo del punto de ignición del gas natural.

Los controles para los vaporizadores de combustión sumergida son más complejos en comparación a los vaporizadores de bastidor (ORV). El SCV tiene más piezas de equipamiento, tales como el soplador de aire, la tubería de dispersión y el sistema de gestión del quemador que se debe mantener. Los SCV son compactos y no requieren demasiada superficie en comparación con las demás opciones de vaporizadores.

Parámetros del proceso principal del SCV

Capacidad del GNL 200T/h
Densidad del GNL 0.44X1000Kg/m³
Temperatura de salida del GNL 100℃
Potencia de la bomba de agua marina 1500KW
Capacidad de la bomba de agua marina 8930m³/h
Presión de entrada y salida 0.7MP

Flujo del proceso

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